El momento para la inversión fintech en Asia es ahora… y por poco tiempo

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Todavía bajo el shock general por la valoración de Ant (el brazo fintech de AliBaba) que le pone al nivel del quinto banco chino, las inversiones fintech están en explosión en todo Asia. El gigante del comercio electrónico japonés Rakuten, dueño además de Viber (el whatsapp japonés) compra Azimo para tener un sistema de pagos y transferencias como forma de expandirse en Asia.Esta semana se conoció también el volumen de inversión fintech en Asia Pacífico durante 2015: 43.000M€. Un dato significativo de un análisis generalizado: en China menos de un 12% de la financiación obtenida por las PYMEs en el último año fue provista por bancos, el resto lo fue en su mayoría por sistemas de crédito interpersonales y bancos «underground», un espacio que se espera tomen las fintech.Pero el Asia musulmana tampoco va a la zaga y Malasia se postula como la capital del fintech de las finanzas islámicas, es decir, de la adaptación de este jugoso submercado hasta cierto punto equivalente a las «finanzas éticas» europeas… quienes por cierto, no tienen todavía su update fintech.En el perfil de cliente más alto, el panorama en los Emiratos Árabes resulta aun más llamativo: En Dubai el fintech está modificando la industria de inversión a través de apps como:

  • Beevihe: un p2p para inversores y PYMEs
  • Bayut: El portal que lidera la inversión inmobiliaria en Emiratos
  • Dubizzle: La app y portal para inversión en productos de lujo y coleccionismo (aviones, automóviles históricos, etc.)
  • Durise: Un crowdfunding para la inversión inmobiliaria

El mercado fintech dubaití y de emiratos en general está orientado, como puede verse, a un perfil alto de inversor que utiliza las apps y las páginas webs de servicios de inversión como una suerte de entretenimiento personal al margen de las grandes carteras institucionales. Este modelo que se muestra en el uso social de Dubizzle, tiene una conexión obvia con el sector del seguro.Es el momento para tomar la idea y mejorarla abriendo la inversión inmobiliaria y coleccionista al inversor de alto perfil característico de los países del Golfo.